El tiburón ballena recibe su nombre por el gran parecido que tiene con el cetáceo, llamado Rhincodon typus es el pez más grande del mundo, según la Organización Internacional de la Conservación Marina, tiene aproximadamente entre 17 y 18 cm de longitud, pesa medianamente 34000 kg que equivale a 34 toneladas. Este magnífico animal tiene una piel característica con manchas y rayas que son únicas en cada ejemplar y que lo distinguen de otros peces en el océano.
Si quieres saberlo todo acerca del tiburón ballena, llegaste al lugar indicado, aquí tenemos mucha información del más grande pez que hay en la Tierra, sigue leyendo.
Un tiburón ballena estándar mide unos 15 metros, lo que es mucho menos que la ballena azul, pero mucho más que cualquier pez que cruce las aguas. Su cuerpo es delgado y largo, pero la cabeza es ancha y aplanada, lo que le da una silueta particular y distintiva. La boca es muy amplia y aunque esto luzca aterrador, resulta que esta especie no es carnívora, por lo que no representa peligro para el ser humano, de hecho, ni siquiera tiene dientes.
Los ojos son muy pequeños y están a cada extremo de la cabeza. Recientemente se descubrió que su visión es privilegiada debido al retraimiento del globo ocular de la cavidad del ojo. Detrás de los ojos podemos ver los espiráculos, orificios externos que usan para respirar junto con las branquias, de las cuales tienen 5 pares. Las aletas son dorsales y pectorales que, junto con la cola, constituyen su sistema de nado. El tiburón ballena no es un nadador muy bueno, teniendo en cuenta su estructura corporal no alcanza grandes velocidades.
El pez ballena puede morir si no permanece en el agua, su respiración es mediante las branquias, gran diferencia con las ballenas, que salen a la superficie en búsqueda del aíre para dicha función vital como respirar.
Históricamente, se reseña su primera aparición es en Sudáfrica a mediados del año 1828 y se presume que tiene más de sesenta millones de años en el planeta Tierra.
De acuerdo a investigaciones recientes, se comenta que existen a nivel mundial menos de siete mil ejemplares del pez ballena, sin embargo, donde se han hecho notar en los últimos tiempos son en las costas de Perú y Ecuador. Pueden convivir pacíficamente con otras especies marinas tales como: ballenas, tortugas, otras especies de tiburones, entre otros.
El tiburón ballena se desenvuelve en aguas profundas, de las que son inalcanzables para el ser humano, incluso con la tecnología más avanzada, es por esa razón que se dificulta mucho su estudio y se ignoran tantos detalles de la vida de este pez.
Uno de esos detalles es cómo es la reproducción del tiburón ballena, se sabe que se reproduce por medio de huevos, pero estos permanecen dentro del vientre materno hasta eclosionar, así que la manera en que nacen las crías se parece mucho a un parto de mamíferos.
Se cree que el cortejo, el apareamiento y la cría de los hijos se realiza en las profundidades, ya que no se suelen ver ninguna de estas conductas, solo 23 neonatos han sido avistados y registrados en el mundo.
Otro dato que se conoce acerca de su reproducción es que el tiburón ballena puede tener más de 250 crías, a lo largo de su vida, pero estas nacen siendo muy vulnerables y presa fácil de los depredadores, lo que contribuye con el poco número de ejemplares que se estiman de esta especie.
Esto denota que la población de machos es reducida en contraste con la hembra, en los avistamientos representan un 99% cuando se encuentran alejadas de las profundidades del mar. Cabe destacar que la madurez sexual en esta especie inicia a los 30 años de vida, cuando miden alrededor de 11 cm de longitud.
Con respecto a las formas de cómo es el encuentro entre el macho y la hembra, aún es desconocido por los investigadores, no se sabe dónde se reproducen, aunque hay sospechas que la Isla Galápagos (Ecuador) sea el epicentro de hembras parturientas.
Es poco común saber del pez ballena en sus primeros 5 años de vida e incluso en todas las reseñas de investigación solo se ha contabilizaron 21 neonatos.
El tiburón ballena habita las aguas cálidas, así que se concentra en la zona cercana a los trópicos. Se sabe que pasa parte de su vida en las profundidades de los océanos, donde se aparea y cría a sus descendientes, pero no sabemos nada más por lo inaccesible que es esta zona para el ser humano.
Tiene un comportamiento migratorio, pero esto también es un misterio, se le ha avistado en algunas zonas frías, como las costas de New York, pero no se sabe las circunstancias que lo hacen moverse hacia allá. Se sabe que los machos se mueven más dispersamente y las hembras son más específicas en las zonas que eligen para hacer vida.
La migración del pez ballena ocurre en cada estación primaveral en Australia por su costa, ya que allí se reproducen en volumen el plancton, debido al Arrecife de Ningaloo.
Cabe destacar que con el pez ballena se tiene la certeza de cuándo se pueden ver, cuándo deciden alejarse, pero luego desaparecen por completo, sin dejar rastros, va influir mucho las temperaturas de invierno, ellas se mantienen distantes hasta que vuelvan a ser templadas.
El tiburón ballena no es carnívoro, puede ingerir algunos peces pequeños, pero de manera accidental mientras ingiere su comida favorita, el plancton. Gracias a eso, el tiburón ballena no representa peligro para el ser humano, incluso, hay bastantes registros de interacciones entre tiburones ballenas y personas, esta especie deja que lo tomen para nadar, se deja tocar y, en general, es bastante dócil.
El procedimiento para alimentarse es muy interesante. Si hay suficiente alimento en la zona en que se encuentra, el tiburón ballena abre su gran boca y se coloca de manera vertical, de esta manera se llena la boca de agua mezclada con el plancton, krill, algas y algunos cangrejos y peces pequeños, cuando está satisfecho con la cantidad que tiene, cierra la boca y expulsa el agua por las branquias. Toda la comida se queda en su boca para ser engullida.
Cuando el alimento no es tan abundante, el tiburón ballena se comporta como una aspiradora gigante, con su boca abierta aspira el agua, moviéndose por toda el área, de manera que queden atrapados la mayor cantidad de pequeños organismos que le sirven de comida.
Es importante destacar que debido al cambio climático el pez tiburón está en riesgo permanente. Las temperaturas del agua han cambiado, a medida que se calientan altera la distribución de la fuente de alimentos. Así mismo el continuo deterioro de su hábitat, crea un impacto negativo para la permanencia de esta especie.
Hay organizaciones de científicos a nivel mundial, dedicados al estudio de esta especie. A partir de avistamientos y de trabajo en equipo es posible un mejor entendimiento acerca de esta misteriosa especie conocida como pez ballena, nuevos conocimientos que contribuyan a su permanencia dentro del ecosistema marino. Espero que te haya sido interesante esta información.
Como ves, el tiburón ballena es una especie muy interesante y misteriosa que merece la pena estudiar, observar y conservar. Espero que este artículo haya sido de tu agrado.
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