Es muy difícil resistirse al encanto de los conejos. Parecen hechos para despertar el lado más tierno de adultos y niños. Todo en ellos su cuerpo suave, sus orejas, invitan a querer tener muchos y así también es el conejo californiano.
Esta raza es particularmente llamativa por su imagen esponjosa, su pelaje muy suave, sus grandes orejas, y la combinación de su manto. En definitiva, hay muchas cosas que saber sobre este peludo, sus cuidados y todo lo que necesita para tener una vida larga y sana.
Conejo californiano: origen
El nombre de este ejemplar deja muy en claro de donde proviene. Este lagomorfo es originario de Estados Unidos. Su historia está ligada a George West, quien, en la década de los años 20, estaba decidido a obtener una raza con ciertas características morfológicas y anatómicas.
En un proceso que llevó alrededor de cinco años, West, llevó a cabo la mezcla de dos interesantes especies. Se trata del conejo americano chinchilla con la raza de conejo himalayo. El objetivo era alcanzar un espécimen que destacase por una tonalidad muy blanca. De acuerdo a diferentes versiones, estos ejemplares a su vez fueron cruzados con individuos de la raza Nueva Zelanda. Con lo que finalmente se llegó al conejo California que se conoce hoy en día.
El proceso de exhibición, para dar a conocer esta raza, empezó hacia 1928. Luego, también fue mostrado en diferentes convenciones, logrando reconocimiento como raza en 1939 por de la American Rabbit Breeders Association (ARBA). Un paso fundamental para el desarrollo de este conejo.
Conejo californiano: características.
La característica física más llamativa e imponente es el luminoso color blanco del pelaje espeso del conejo californiano. Sin duda, está entre los más brillantes colores de los lagomorfos. Y cubre prácticamente todo su cuerpo. A su vez tiene hay una segunda coloración que se distribuye en la distribuye nariz, orejas y patas.
Esta pigmentación es oscura y puede variar de color. Es común que sea de color negro, pero también se da en azul, chocolate, lila, marrón oscuro. Hay que mencionar que la temperatura interviene en la coloración del pelaje. Los ejemplares que habitan en zonas más frías, muestran más tonos oscuros en el manto. En cambio, los conejos californianos que habitan en lugares con climas cálidos exhiben de manera nítida las zonas delimitadas oscuras y el blanco en el resto del cuerpo.
Otra cualidad que destaca en sus características físicas es que sus ojos son rojos, de buen tamaño. Al llegar a su etapa adulta su cuerpo puede pesar entre los 3.6 kilogramos y alcanzar hasta los 5 kilogramos. Tiene una longitud de que comprende de 40 centímetros a 60 centímetros.
Su cuerpo es fuerte, redondeado, con buen tono muscular. De manera usual se clasifica como un conejo mediano, pero hay interpretaciones que lo colocan como un intermedio entre medianos y grandes. Las patas traseras son más fuertes, musculosas.
Sus orejas suelen estar erguidas, aunque dan la impresión de ser grandes, estas alcanzan los 3 centímetros. Son más anchas en la base y se hacen más finas hacia la punta terminando en una forma redondead. La estructura de la cabeza también es redondeada.
Conejo californiano: conducta
Tal como se ve de suave y abrazable, así también es el carácter del conejo californiano. Es muy cariñoso, le gusta recibir afecto, lo que disfrutan mucho. Por estas cualidades son muy buenos compañeros para los pequeños de la casa.
Al principio se muestran tímidos, pero es algo que van superando hasta lograr una conexión con las personas en su entorno. también pueden adaptarse a otras mascotas. Suelen ser muy curiosos, quieren recorrer todos los espacios disponibles.
Entre sus cualidades hay que destacar que posee una buena capacidad de aprendizaje. Su inteligencia le permite, con entrenamiento y paciencia, a realizar diferentes tareas o asimilar conductas.
Un elemento común entre las diferentes razas es la necesidad tener espacios tranquilos, sobre todo un lugar en el que puedan sentirse protegidos y relajados. Esto los ayudará a evitar situaciones de estrés.
Alimentación del conejo californiano
Tal como dijimos el conejo californiano es fuerte y robusto, necesita una alimentación adecuada para lograr un desarrollo físico pleno.
El principal alimento que debe constar en su alimentación es el heno. Este le suministra todos los nutrientes que requiere su organismo. Además, al poseer alto niveles de fibra es fundamental para que el proceso digestivo sea fluido y sano.
Ahora bien, como suele pasar con muchos animales, no regulan mucho la cantidad de comida que ingieren. Esto provoca problemas de obesidad. Es necesario que le proporciones las cantidades adecuadas y evitar los excesos. Lo que no debe faltarle es el suministro constante de agua fresca, no consumen mucha, pero se pueden deshidratar con facilidad si no la tienen disponible.
Puedes complementar con frutas y verduras, siempre que sean en cantidades adecuadas.
Cuidados del conejo California
Con las características físicas que posee de tamaño y fuerza, es necesario que tenga una vida activa. Por lo tanto, mientras más tiempo puedan estar fuera de la jaula es beneficioso para ellos. Así podrán usar toda su energía, ejercitarse con el movimiento lo que estimula su salud mental. Además, esto influye en que no desarrollen enfermedades por sobrepeso.
Hay que dedicarle tiempo al cuidado del pelo. Es necesario elegir un buen cepillo para cepillarlos varias veces a la semana.
Para preservar su salud es necesario que eviten lugares húmedos. Limpia la jaula, los utensilios que use, así como eliminar diariamente los desechos. Todos estos pasos de higiene son muy importantes en la prevención de diferentes enfermedades, como las causadas por hongos.
Los conejos necesitan desgastar sus dientes, ya que no dejan de crecer. en esta tarea es muy útil el heno, por que es fibroso, sin embargo, es aconsejable que le des un juguete, un objeto que puedan roer sin problema, ni riesgo.
La mejor recomendación, para que tu conejo esté saludable y contento, es llevarlo de manera regular al veterinario. Por supuesto, hacerle seguimiento y cumplir la agenda de vacunas cuando son crías. Y sobre todo tratarlo con mucho afecto, ya que son animales muy sensibles y perceptivos.