Perro de agua portugués

Cachorro de perro de agua portugues

El perro de agua portugués exhibe una elegancia natural en su porte. Es un peludo lleno de energía que disfruta estar en actividad, en especial en el agua, donde demuestra que más que un perro cazador es un notable pescador.

De medianas dimensiones, destaca por su estabilidad, capacidad de seguir instrucciones, así como por su pelaje. Su expresión es seria y, a la vez, muy dócil.

Es originario de Algarve, una zona marítima de Portugal. Era un compañero infaltable en las expediciones pesqueras por su gran olfato, condición física, y por ser un gran nadador. Empujaba a los peces que rehuían las redes o atrapaba con su hocico a los que pretendían escapar.

Su historia es antigua. Ya existía en el siglo XV, de acuerdo a registros que señalan como actuaba en las embarcaciones y su ayuda en diferentes tareas. Fue reconocido por la FCI en 1955 y el estándar data de 2008.

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Características del perro de agua portugués

Su capacidad de trabajo se refleja de manera perfecta en su cuerpo robusto, bien musculado, potente y a la vez ágil y liviano. Un experto en lanzarse al agua desde las embarcaciones.

Resultan muy llamativas sus orejas, con su peculiar modo de estar caídas muy junto a la cabeza. Tienen un punto de inserción elevado, son delgadas, tapan el oído y están bien cubiertas de pelo abundante.

La cabeza tiene una longitud mayor que la del hocico, de buen grosor, robusta en armonía con las dimensiones del cuerpo.

Los ojos son redondeados y oscuros, suele parecer que están ubicados a gran profundidad en sus órbitas.

El hocico es robusto, ancho, se estrecha levemente hacia la punta, termina romo, nunca es agudo. Los labios son firmes y no demasiado ceñidos. La trufa no tiene proyección sobre el hocico, es oscura, con las ventanas abiertas, sin ser demasiado anchas.

El cuello es mediano, grueso y se ve realzado por el pelaje. El pecho es profundo y musculoso igual que los hombros. Las extremidades son gruesas, firmes, muy estables y con la capacidad muscular para darle potencia.

La cola es más amplia en la base, a medida que se extiende hacia la punta se estrecha y esta resguardada por el pelo.

Peso del perro de agua portugués

El peso del perro de agua portugués es de 12 a 25 kg.

Tamaño del perro de agua portugués

La estatura es diferente en esta raza en machos y hembras. El macho mide de 50 a 55 cm, en tanto que la hembra suele estar entre los 45 y 50 cm.

Pelaje del perro de agua portugués

El perro de agua portugués se puede presentar con dos tipos de pelo diferentes: puede ser largo o corto. El manto más largo suele tener el pelo ondulado con una brillantez natural. El pelo corto es muy denso, fuertemente encrespado.

Carecen de una subcapa de pelo y tienen la ventaja de no perder pelo.
El color de estos peludos varía: negro, blanco, pardo en diferentes tonalidades. También hay ejemplares que poseen mezclas de estos colores.

Esperanza de vida del perro de agua portugués

En promedio la expectativa de vida es de 10 a 14 años.

Comportamiento del perro de agua portugués

No solo se caracteriza por sus cualidades de cazador, sino que también es un magnifico perro guardián. Posee sentidos muy finos, y aunque no es muy ladrador, advertirá de cualquier situación o persona que pueda parecer amenazante.

El perro de agua portugués es muy activo y prefiere estar en constante movimiento, así que tiende a comportarse como si estuviera en una competencia. Aunque con el entrenamiento adecuado y la socialización se adapta muy bien a estar en casa.

Para estos peludos los niños son una gran compañía, y es que no son canes nada agresivos, aunque en ocasiones pueden ser algo traviesos o toscos. Siempre se sugiere supervisión con niños pequeños.

Su relación con las personas es compleja. Se adaptan muy bien a la familia, crean fuertes lazos de cariño y cuidado, pero, sin embargo, son muy independientes. Esto no quiere decir que puedan dejarse solos todo el día en un lugar, aunque sea amplio. Necesitan tener la compañía de su familia humana.

Poseen mucha curiosidad, disfrutan tener actividades desafiantes, mientras más complejas mejor, así se estimulara su inteligencia.

Principales enfermedades del perro de agua portugués

Por naturaleza son perros muy sanos, aun así hay varias enfermedades que puede experimentar.

Una de ellas es la displasia de cadera o de codo, desgaste de retina, problemas del estómago. Como es natural en perros con este tipo de pelaje, siempre hay riesgo de pérdida de pelo, hongos, etc.

Otra afección es la enfermedad de almacenamiento, que debido a determinadas reacciones químicas lleva a fallas en la creación de ciertos componentes enzimáticos en el organismo.

Las posibilidades de que desarrolle estas enfermedades son muy bajas. Quizá la que tenga mayor prevalencia sea la displasia.

Cuidados básicos del perro de agua portugués

El manto es particularmente delicado. Aunque es fuerte y resistente es preferible cepillarlo a diario. De esta manera se evitará que los enredos del pelo se vuelvan un problema de salud.

Si no se tiene mucha experiencia es preferible llevarlo a un peluquero con conocimientos en esta raza. No solo para cortarle el pelo adecuadamente, sino para bañarlo.

El perro de agua portugués necesita de personas que le puedan prestar atención, dedicarle tiempo al cuidado del manto, así como a realizar actividades, juegos, paseos y disfrute llevarlos al agua.

Hay que recordar que el ejercicio es indispensable en su salud, y además es un gran nadador, que se siente muy bien jugando y nadando. Por lo tanto, hay que considerar vivir cerca de algún lugar donde pueda hacerlo con confianza y seguridad.

Curiosidades del perro de agua portugués

Ya se comentó que en su uso histórico, el perro de agua portugués era un compañero de los pescadores por las actividades propias de la pesca. Un dato llamativo es que también ayudaba a orientarlos en el mar.

El perro de agua portugués es dueño de un olfato y vista muy desarrollados. De manera que cuando la niebla o las condiciones no eran muy favorables, este peludo advertía la cercanía de otros barcos. Y así se evitaban colisiones que podrían ser muy graves.

En el siglo XX enfrentó una grave disminución de individuos, tan severa que pudo haberse extinguido hacia la década de los 60. Por fortuna, varios criadores decidieron rescatarla y logro un nuevo auge. Para los años 80 había llamado la atención de muchas personas en Estados Unidos y a partir de entonces se hizo más conocida tanto en Europa como en otros países.

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