La vida con la amorosa compañía de un perro es única, emocionante y sobre todo feliz. También es un compromiso, que además de jugar con ellos y darles cariño, hay que darles todos los cuidados y protección que puedas. Y claro, también tomarle fotos de cada cosa tierna y divertida que hace.
Una de las zonas más importantes en la salud física y mental de un perro es la boca. Son muchos los problemas que ocurren en esta zona, por lo que la prevención es tu mejor herramienta. Desde malformaciones dentarias, infecciones, problemas para masticar, sin contar que se traguen algo que no deben. En fin, hay que prestarle atención a esta parte de su anatomía para que este saludable y feliz.
Respecto a la limpieza de los dientes seguro hay muchas dudas, o incluso hay quien piense que no es necesario. Si no quieres seguir con incógnitas y preguntas sobre la salud bucal y el cepillado revisa en detalle esta información que debes conocer para evitarle problemas a tu canino.
Cuidados para la salud bucal del perro
Una de las primeras tareas para que tu perro tenga una boca u hocico en óptimas condiciones es vigilar el tipo de pienso que le das. De acuerdo a diferentes circunstancias debes optar por los húmedos o los secos. Sea cual sea la elección, elige de la mejor calidad que puedas.
En general, los especialistas recomiendan que el pienso sea seco, ya que este no se queda o se queda menos entre los dientes, de manera que la limpieza y eliminación de restos es mucho más sencilla.
Los huesos cocinados no son siempre la mejor opción. El motivo es que pueden debilitarse, romperse o astillarse y lastimar los dientes, las encías o tragar algún fragmento con resultados más graves.
Los perros son curiosos por naturaleza, se dejan llevar por su olfato y eso, muchas veces los hace probar cosas que terminan por hacerles daño. Entonces es indispensable que no puedan acceder ni a la basura, ni a elementos químicos, medicinas desechadas, sustancias de limpieza y demás.
Desinfectar el hocico de un perro
Una vez que el perro empieza a presentar problemas como dolor, mal aliento, encías enrojecidas, disminuye la cantidad de comida o deja de comer son señales claras de que ya hay un problema. Por lo general en esas circunstancias debes acudir al veterinario para que lo evalúe, y muy probablemente le haga una limpieza profunda. Para lo cual tendrá que anestesiar al animalito, tanto por comodidad como seguridad de ambos, el veterinario y el perro.
Hay varias opciones para auxiliar al perro en estas circunstancias. No lo curarán pero serán paliativos hasta tanto el especialista dictamine lo que se necesita hacer. Es muy común el uso de suero fisiológico para lavar oídos y ojos de los peludos, también puede servir para limpiar la zona bucal, las encías y tratar de aliviar un poco la inflamación.
También puedes utilizar gel o líquidos antibacteriales que sean exclusivos para perros. Utilizar sustancias de este tipo, sin que sean las adecuadas pueden ocasionar problemas de otra índole.
Pasta dental en perros
En la salud de los peludos, una medida esencial que hay que tomar es suministrarle los productos específicos para perros. Son muchos los riesgos que se toman, si se les suministra productos que no han sido diseñados, pensados para todas las características específicas de estos mamíferos.
Lo mismo pasa con la pasta dental, es necesaria la canina. La pasta dental par humanos puede afectarlos de forma negativa, por sus componente y la concentración de los mismos. En particular el flúor es capaz de afectar el sistema digestivo, así como la salivación, flora bacteriana normal. Tampoco es aconsejable suministrarles sal o bicarbonato por motivos similares.
Mantener limpios los dientes a un perro
Hay varias enfermedades que pueden afectar los dientes y encías de tu perro. La más común empieza por el sarro. Se hace visible como una capa que suele ser amarillenta. Afecta los dientes, la lengua y las encías. Aparece por la acumulación bacteriana producto de la alimentación. Esta puede degenerar en otras enfermedades como gingivitis o periodontitis. Las consecuencias son bastantes serias, daños y pérdidas de los dientes, lesiones en encías incluso a los huesos. Con todas las implicaciones al sistema digestivo, riñones, etc. algo que también afecta su ánimo.
Entonces hay que considerar todas las opciones para evitar que los perritos lleguen a esa situación.
Cepillar los dientes de perros
Tal vez algunas personas se sorprendan, pero en efecto los dientes de los perros hay que cepillarlos, puede ser un poco complejo acostumbrar al perro, pero es infaltable por todas las razones que ya te contamos arriba.
Lo más recomendable es empezar a limpiarles los dientes desde que son cachorros. Así se irán a acostumbrando a esta actividad, y la asimilaran como algo natural. Cuando son pequeños puedes empezar usando una gasa, o tela muy suave. La envuelves en uno o dos dedos y con delicadeza vas limpiando sus dientes. En principio este proceso lo puedes llevar a cabo solo con agua.
Este proceso es mero repetirlo varias veces al día, no siempre estarán felices con ello, pero irán percibiendo que no es algo malo. Serán más pacientes con una rutina que ya conocen.
Recuerda que los animales y más los perros, funcionan con estímulos positivos, motivados, por lo que la presión, el castigo o forzarlos no va a dar los resultados que necesitas.
Luego de un tiempo puedes pasar al cepillo dental especial para perros. Hay varios modelos, algunos tienen el mango o asa huecos. Son así para que puedas introducir los dedos, lo que hará más fácil la tarea. Comienza por mostrarles el cepillo, permite que lo olisquen, que jueguen, hasta que lo mordisquen un poco. Así también será algo que reconozca y no le hará daño.
Puedes probar con distintos modelos de cepillo, hasta dar con el que se sienta más cómodo tu cachorro. Recuerda que los primeros años, a menos que haya un problema de alimentación o alguna enfermedad, sus dientes serán blancos, fuertes y no tendrá mal aliento, pero a partir de los 2 años y medio o 3 años, empiezan a aparecer síntomas notorios como manchas amarillas y muy mal aliento. Antes de que eso ocurra hay que tomar estas mediadas.
Cada cuánto tiempo hay que cepillar a un perro
Hay diferentes recomendaciones en cuanto a este punto. Algunas dueños de perros son escépticos por cuanto dicen que los perros en la naturaleza o los que no son parte de una familia no asean sus dientes. El problema es que por un lado si se hacen aseo con los huesos y por otro, que este tipo de enfermedades se toma un tiempo en aparecer, pero es seguro que las padecerán si no hay limpieza adecuada.
El cepillado es una tarea fundamental para protegerlos, los veterinarios indican que debe realizar todos los días. Así estarán en mucho mejor estado. Ahora bien, si por diferentes motivos no lo puedes hacer a diario, bastará con repetirlo de dos a tres veces por semana.
Un dato adicional es que también hay diferentes tipos de pastas dentales para perros, prueba con varias hasta que el sabor sea el que más disfrute tu mascota. Y no olvides premiarlo de alguna manera, darle mucho afecto después del cepillado para que asocie la limpieza con algo placentero.
Qué usar para limpiar los dientes de un perro
El cepillado nunca debe faltar, es esencial para limpieza. Ahora bien, hay otros métodos y elementos que puedes sumar para aumentar la protección dental. Hay varios juguetes, accesorios, hasta alimentos que funcionan para mejorar este hábito.
Puedes utilizar gel o líquidos que tengan cualidades antibacteriales, antisépticos. Son de ayuda para combar el sarro, así como el desagradable mal olor bucal. Pon enjuague bucal canino en el recipiente del agua. De manera que cada vez que tome agua tendrá una protección adicional, esto sirve para que tenga buen aliento.
Hay varios tipos de juguetes que sirven en esta tarea. El mordedor con ranuras, tiene una forma un poco extraña, es flexible, resistente y actúa como limpiador de dientes y encías. Hay juguetes diseñados con púas flexibles que cumplen esta función.
Los juguetes hechos como parte de instrumentos de limpieza, es preferible que sean de nylon, caucho entre otros materiales. Funcionan para darle fortaleza a la dentadura, la mandíbula. Algunos están hechos con hilos fuertes, estos tienen la ventaja de acceder a los espacios de dientes y encías con gran capacidad limpiadora.
Aparte de este tipo de elementos también hay algunos productos alimenticios muy específicos para cuidar los dientes. Así los snaks con formas que recuerdan el aseo de los dientes, tienen diferentes elementos que ayudan a mantener protegidos los dientes de los restos alimenticios.
También están los huesos hechos para perros para que limpien los dientes con diferentes relieves y hendiduras. Por otra parte, los huesos prensados son comestibles. Esto cumple la función de limpieza además de mantenerlos ocupados en una actividad que los mantiene muy serenos.
Con todas estas herramientas podrás darle el mejor cuidado bucal a tu perro, sin olvidar que al menos dos veces al año hay que llevarlos al veterinario para que verifique su estado y, si lo ve conveniente, haga una limpieza profunda.
