Muchos propietarios de animales desean que sus mascotas reciban una alimentación natural y sana, en la misma medida que los seres humanos. Actualmente, existen muchas opciones de alimentación seca y húmeda para mascotas que ofrecen todos los nutrientes que los animales necesitan, pero ninguna es tan recomendable para su salud y para su felicidad como la dieta BARF. Si no conoces qué es la dieta BARF, en esta guía te damos todas las claves para tener una mascota bien alimentada y sana.

Qué es la dieta BARF

La dieta BARF es un tipo de dieta natural que se basa en la alimentación de perros y gatos mediante productos completamente naturales, como carne, huesos, vegetales y frutas. Recibe su nombre de las siglas formadas por varias palabras, que en castellano se traducen como alimentación cruda biológicamente apropiada. Un tipo de alimentación que acerca a los animales de compañía a su lado más salvaje, que cuida de su salud y que resulta deliciosa.

Al estar basada principalmente en proteínas, los perros y gatos reciben un mayor aporte energético, y sus músculos y huesos están más sanos y fuertes. Además, el aporte de verdura y fruta en pequeñas cantidades hacen que su alimentación sea completa y equilibrada.

Cómo se administra la dieta BARF

El mayor problema de este sistema es que muchos propietarios de animales desconocen cómo deben ser las raciones en cuanto a cantidad o qué deben contener y en qué proporción para que sus mascotas estén bien alimentadas. Pero saberlo no resulta tan complicado como puede parecer.

El primer paso es hacerse con las materias primas que van a componer la dieta BARF de nuestro mejor amigo. Principalmente carne de cualquier animal y huesos carnosos. La carne no tiene por qué ser de primera categoría, bastan los restos de los despieces y los órganos de los animales que no se destinan al consumo humano, pero que tendrán una gran aceptación por parte de las mascotas.

En cuanto a los huesos, hay que asegurarse de que sean carnosos y tiernos para proteger la salud de nuestros amigos. Y, sobre todo, nunca cocinarlos para evitar que puedan astillarse y provocarles daños internos. A estos productos habrá que añadir un pequeño porcentaje de verduras y frutas aptas para el consumo de nuestros animales, como la manzana, la pera el plátano, las zanahorias, la calabaza, el brócoli, la coliflor, la lechuga, etc. Lo más importante es que exista variedad de materias primas, para que los perros y los gatos puedan aprovechar todos los beneficios de los distintos alimentos.

Sobre las cantidades, es algo que no se puede generalizar, puesto que dependerá del tamaño y la edad de cada animal, además del ejercicio físico que realicen. En términos generales, un animal adulto tendrá que tomar entre un dos y un tres por ciento del total de tu peso a diario. Aunque esas proporciones aumentan en cachorros y en animales de talla pequeña, y disminuyen en animales de talla muy grande. Aprovecha todos los beneficios para la salud de tu mascota con la dieta BARF, porque desde el primer momento notarás una mejoría a todos los niveles.

 

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