Esta desconocida raza tiene origen en el continente africano, concretamente en países como Malí, Níger y Burkina Faso. Parece extraño que esta región del planeta haya dado lugar a un perro como azawakh, pero lo cierto es que son varias las razas caninas que proceden de África. Esta raza está también conocida como galgo africano por sus características físicas, y es que guardan una gran similitud con otras variedades de galgo.
El origen del galgo africano es difícil de definir, puesto que no existen registros del comienzo de su historia. Se sabe que lleva cientos de años en la tierra, y que era muy valorado como compañero por los habitantes de la zona. En un primer momento, las tribus nómadas utilizaban a esta raza como perro guardián cuando se movían por el Sahara, ya que estaban capacitados para protegerlos y para ayudarles en la caza. Eran los compañeros perfectos para estos seres humanos tanto por sus características físicas como por su temperamento, por lo que su cría se mantuvo durante mucho tiempo.
Hasta mediados del siglo XX, no era posible encontrar ejemplares de azawakh fuera del continente africano debido a la gran estima de los africanos por esta raza fuerte y protectora. Casi hasta la actualidad, este perro ha sido el guardián de las tribus de esta zona, por lo que no permitían que otros lugares pudieran llevárselos.
Finalmente, la raza se exportó a otros continentes por medio de un regalo de una de las tribus del desierto del Sahara, llegando primero a Europa y posteriormente a otras partes del mundo. Aunque se extendió por todo el globo, lo cierto es que este animal nunca ha llegado a conseguir la fama o el interés como sí han hecho otras razas, razón por la que resulta complicado conseguir un cachorro de galgo africano en muchas partes del mundo.
Por sus características físicas de tamaño, velocidad y fuerza, este perro era utilizado para cazar gacelas. Se trata de una raza de tamaño grande en cuanto a su altura, pero mediano en cuanto a su peso, y es que es un perro atlético y fibroso, pero no muy robusto. Su tipología es más bien cuadrada, con unas patas delgadas y muy largas. Resaltan en su cuerpo unos músculos fibrosos y muy bien definidos, que le otorgan una condición física envidiable.
Posee un pecho abultado y profundo, que destaca en la forma de su figura y que es otra de las características que le ayuda a rendir físicamente mejor que otras muchas razas. Además, se puede decir que la forma de su cuerpo es aerodinámica, lo que le permite correr a gran velocidad con el propósito de perseguir a una presa o de escapar en un ataque.
Llama también la atención su cara alargada y fina, con unos ojos grandes y profundos, un cuello largo y fuerte y unas orejas bastante grandes que se doblan y caen muy pegadas a ambos lados de la cabeza. Además, posee una larga cola, curvada por lo general hacia arriba, aunque también la mantiene entre las patas traseras.
El azawakh mide generalmente entre 60 y 74 centímetros dependiendo de su sexo, una altura considerable como para poder decir que es una raza grande, aunque no sea muy corpulenta o pesada. Por el contrario, su peso se mantiene entre los 15 y los 25 kilogramos, cifras que suelen darse en perros más pequeños. Lo importante es que se mantenga bien proporcionado y que su figura esté siempre estilizada.
El galgo africano cuenta con un pelaje muy corto, duro y áspero al tacto, que apenas necesita cuidados para mantenerse en un perfecto estado. Esta escasez de pelaje se debe a su vida en zonas donde por lo general el clima es cálido y la temperatura elevada. Además, puede mostrarse en varias tonalidades, como leonado, arena, canela o leonado oscuro, y también se acepta el atigrado. También deben aparecer manchas blancas en la punta de la cola, en las patas y en el pecho.
El azawakh es una raza con un temperamento muy suyo. Es un poco testarudo y le cuesta obedecer a quien no respeta, por lo que el entrenamiento tradicional no suele dar sus frutos. Sin embargo, también es un animal protector con su familia, leal y afectuoso, que siempre estará buscando el contacto humano.
Su instinto de caza está muy desarrollado, por lo que no se recomienda en familias donde vivan otros animales. Tampoco es aconsejable dejarlo sin supervisión con los niños, porque, a pesar de que nunca querrá hacerles daño a posta, podría hacerlo debido a su tamaño y energía.
No es un animal demasiado sociable por naturaleza, es reservado y arisco con los extraños, otra razón por la que puede ser un buen perro guardián. Sin embargo, con una buena educación y socialización temprana, es posible conseguir un perro adulto equilibrado y tolerante en la mayoría de las situaciones.
El azawakh tiene una esperanza media de vida de unos 12 años, aunque es una raza con tendencia a sufrir algunos problemas de salud de diversa consideración. Por ejemplo, es habitual encontrar ejemplares con epilepsia, espondilosis o problemas autoinmunes. También es una raza propensa a la torsión de estómago y con dificultad para desenvolverse bien en climas fríos.
Esta raza no requiere unos cuidados excesivos a nivel general, pero sí que hay que saber proporcionarle algunos hábitos básicos para que se mantenga en un buen estado de salud. Puesto que su salud es frágil, tendrás que asegurarte de que puede vivir en unas condiciones climatológicas agradables, y que tendrá siempre el espacio adecuado para correr y ejercitarse, ya que es un perro que necesita mucha actividad para mantenerse atlético.
También deberás controlar su alimentación si quieres evitar la temida torsión gástrica, y además que engorde demasiado, ya que ambos problemas son muy peligrosos para el animal. Para ello, apuesta siempre por un alimento de alta calidad que le aporte los nutrientes necesarios, y siempre en las cantidades adecuadas.
En cuanto a los cuidados estéticos, su tipo de pelaje no requiere demasiada dedicación. Únicamente puede necesitar algún cepillado puntual para eliminar el exceso de pelo muerto y un baño cada par de meses para mantenerlo limpio y brillante.
Una educación estricta y constante desde la positividad es la base necesaria para que el perro aprenda a comportarse bien en cualquier situación y para que esté equilibrado y evite los instintos molestos. Recuerda que no es un animal que lleve bien la soledad, por lo que no se recomienda en casos en los que vaya a pasar demasiadas horas solo.
Si crees que esta raza es la adecuada para ti, y que podrás colmar todas sus necesidades de salud, espacio, ejercicio y educación, entonces el siguiente paso es buscar un criador especializado en el azawakh. No será una tarea fácil, puesto que no es una de las razas más famosas del mundo, pero todo el tiempo dedicado conseguirá que tú y tu futuro compañero desarrolléis una relación ideal. Además, solo un criador con experiencia podrá ofrecerte todas las garantías de salud del cachorro y la información necesaria sobre sus cuidados.
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