Tener mascotas es algo muy beneficioso para el ser humano, sobre todo para los niños, que aprenden a ser responsables cuidando a un animal que depende de ellos. Para esto, hay muchas opciones, no debemos limitarnos a los tradicionales: perro, gato, pez, etcétera, podemos elegir a un caracol.
Los caracoles pueden ser una excelente mascota si queremos una que requiera pocos cuidados y que sea muy tranquila. En este post veremos los cuidados que requiere un caracol en el hogar.
¿Qué se necesita para tener un caracol en casa?
Si ya está tomada la decisión de adoptar un caracol, debemos saber que se requieren algunas condiciones para que esté cómodo y bien cuidado, veamos:
La casa
Todo animal necesita un lugar para estar, que reúna algunos requisitos de acuerdo a la biología de la mascota en cuestión:
- Los caracoles requieren un entorno húmedo, por lo tanto, el recipiente debe ser adecuado. Un envase de plástico puede ser bueno, también sirve de vidrio. Lo importante es que tenga ventilación suficiente para que circule el aire dentro, unos agujeros por los lados serán suficientes.
- Se debe colocar unos 7 centímetros de sustrato al fondo del recipiente, de manera que le sirva de suelo al caracol. Esto puede adquirirse en una tienda de mascotas o utilizar tierra del jardín, cualquier opción se puede complementar con musgo.
- Se pueden colocar unas ramas o elementos similares, dentro del recipiente y sobre el sustrato, para que el caracol tenga algo para trepar.
- El bebedero debe ser poco profundo, al que se le colocará solo una pequeña cantidad de agua, ya que si es mucha podría ahogarse. También necesitará un comedero.
- A los caracoles les gusta esconderse unas horas al día, es buena idea colocarle algún refugio como una casa de terracota o un pequeño matero volcado.
La alimentación
Los caracoles se alimentan de frutas, verduras y hortalizas. Por ejemplo, le puedes ofrecer hojas de lechuga, pedacitos de tomate, zanahorias ralladas, rebanadas de manzana y otras similares.
Estos alimentos se le deben colocar en un comedero poco profundo para que tenga fácil acceso a ellos, cuando ya haya comido y se aleje se debe retirar los restos de comida para evitar que se pudran y contaminen el área.
El aseo
Los caracoles necesitan mucha limpieza, tanto de ellos mismos como de su casa.
La limpieza del caracol se debe hacer con agua esterilizada, sin jabón u otra sustancia limpiadora. Con un bastoncillo o una mota de algodón impregnada de agua se le retira todo el sucio de la concha y el cuerpo. Esto debe hacerse, por lo menos, una vez al mes.
En cuanto a la casa del caracol, debe limpiarse todos los días. Para ello, debes retirar el caracol, colocarlo en algún recipiente preparado con un poco de sustrato. Retirar todo lo que esté dentro del recipiente y lavarlo con agua y un jabón neutro. Luego se vuelve a armar la casa del caracol para colocarlo de nuevo en ella.
Consejos para cuidar a un caracol
- Es aconsejable adoptar más de un caracol, estarán más a gusto y, además, será más divertido verlos, ya que interactuarán unos con otros.
- Algunos expertos aconsejan colocar lombrices de tierra en el suelo de la casa del caracol, ya que se alimentan de los desechos orgánicos y además ayudan a mantener el sustrato en buen estado.
- La mejor manera de lograr la humedad que necesita el caracol es usando un rociador común, para esparcir agua sobre el sustrato, con dos atomizaciones al día será suficiente, a menos que el ambiente esté muy húmedo. Además de eso, taparlo por encima suele encerrar la humedad dentro, si el envase no tiene tapa, se le puede colocar un plástico.
- Es importante que la humedad no sea excesiva, los caracoles no deben estar mojados, solo húmedos. Es conveniente observar si el agua chorrea por las paredes o si se pueden ver gotas condensadas en grandes cantidades, si es así se debe reducir las atomizaciones de agua y retirar el bebedero.
- Nunca tomes al caracol por la concha, esto puede ser muy perjudicial para ellos. La concha del caracol es fácilmente desprendible y si el caracol se separa de su concha se morirá. La manera correcta de tomarlos es humedecer la mano y colocarla enfrente del caracol para que trepe encima de ella. Siempre debes lavarte muy bien las manos o cualquier parte de tu cuerpo que toque el caracol.
- Nunca use arcilla o arena como sustrato, ya que puede ser inconveniente para el caracol. Si no puede conseguir tierra de jardín, adquiera la que venden esterilizada en las tiendas de mascotas.
- Si va a usar tierra de jardín es conveniente meterla en el horno unos minutos, a 100°C, de manera que se eliminen las bacterias presentes, que puedan afectar la vida del caracol.
- Es conveniente sacarlo de vez en cuando de su casa para que explore el entorno. Si se tiene un jardín será mucho mejor. Es bueno colocarle algunas ramas para que trepe y escale, otros objetos como macetas o piedras también serán útiles.
- Las frutas y verduras que le ofrezcas debes lavarlas previamente, ya que los pesticidas que llevan estos productos pueden ser muy perjudiciales para el caracol. Para esto, colócalas bajo el chorro de agua corriente por unos momentos.
- También hay que proveerles de una fuente de calcio, en las tiendas de mascotas se pueden encontrar productos a este respecto. Si no los consigues puedes triturar cáscaras de huevo y colocarlas en el agua o la comida. Los caracoles necesitan calcio para mantener su salud y sobre todo la calidad de la concha.
- Nunca coloque la casa del caracol bajo la luz directa del sol, o de alguna fuente de calor, ya que esto puede reducir la humedad que necesita y además lo puede quemar. Lo ideal es buscar un rincón con temperatura media, sin mucha iluminación y con poca circulación de personas.
Como se ha visto, los caracoles pueden ser unas mascotas magníficas, solo requieren unos pocos cuidados y estarán perfectos.