El origen del gato Napoleón -también conocido como gato Minuet– viene del cruce entre el gato Munchkin y el gato persa, que es de finales del siglo XX y tiene las patas muy cortas por la acondroplasia que padece esta raza, que consiste en unas patas más cortas de lo normal por la mutación del gen dominante que acorta los huesos, aunque ello no compromete la fortaleza que tienen en estas extremidades.
Los perros salchicha (dachshund o teckel) o los Basset hound acusan esta misma afección, equivalente al enanismo que ocurre en el ser humano.
La raza de gato Napoleón o minuet es el resultado del cruce entre el gato munchkin, del que hereda las patas cortas, con un gato persa.
El gato Napoleón tiene una cabeza redonda y corta, con un hocico muy plano, aspecto que recuerda al gato persa. Sus orejas suelen ser pequeñas, pero sus ojos son muy grandes y redondos, mientras que su cuello, a pesar de ser corto, es bastante fuerte.
En cuanto a su cuerpo, hay que destacar que es muy fuerte y sólido, que le otorga una amplia movilidad. Las patas de estos gatos no son iguales: las delanteras son más cortas que las traseras. La cola es mediana y la suele llevar levantada cuando está activo.
El gato Napoleón tiene un pelaje muy suave y denso, que además puede ser corto o largo. Los distintos colores, tanto del pelo como de los ojos, están aceptados en los estándares de esta raza.
Esta raza tiene un carácter muy equilibrado y apacible, destacando su docilidad, cariño, amabilidad y fidelidad, por lo que es una de las mejores opciones para compartir espacio con niños pequeños.
El gato Napoleón se adapta fácilmente al nuevo hogar y convive muy bien con otros animales. Estos animales no aceptan muy bien la soledad, por lo que requerirán tu compañía cuando estés en casa.
También son muy juguetones, que es algo que les diferencia de sus dos predecesores, que tienen un temperamento menos equilibrado que el Minuet.
El gato Napoleón no presenta patologías genéticas particulares de esta raza, pero sí es conveniente prestarle atenciones con visitas frecuentes al veterinario para mantener controlada su salud, así como su programa de vacunas y desparasitaciones.
Los gatos Napoleón son, por tanto, animales que se adaptan muy bien a la vida en el hogar ya que son muy cercanos y familiares, cariñosos. Por ello, pueden vivir en cualquier tipo de casa y con cualquier compañía, lo único que exigen es no pasar demasiado tiempo solos.
Verás que no realizan demasiado ejercicio físico, pero son bastante más activos y juguetones que otras razas de gatos.
El gato Napoleón o Minuet necesita ser cepillado a menudo, especialmente si tiene el pelo largo, puesto que, si no, se le puede enredar muchísimo. Para que se mantenga suave su pelaje, es necesario tomar una rutina de cepillado varias veces a la semana.
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