Los gatos son animales muy fuertes y resistentes. Tanto, que la mayoría de las veces es casi imposible saber a ciencia cierta lo que sienten. Esto se aplica sobre todo a las dolencias físicas, y es que resulta muy complicado advertir cuándo un gato tiene algún problema de salud. Ahora que estamos en pleno invierno, es más importante que nunca que observes a tu gato para cuidar de su salud. Y es que, aunque no salga de casa, es posible que no siempre esté cómodo. Por eso te contamos en este artículo cómo saber si un gato tiene frío, para que puedas proporcionarle un hogar a su medida.

¿Los gatos sienten frío?

La respuesta es sí. Los gatos sienten frío al igual que cualquier otro animal, seres humanos incluidos. La diferencia se encuentra en que nosotros podemos poner el remedio y abrigarnos cuando tenemos frío, pero los animales no tienen otra opción. De hecho, los gatos son más sensibles al frío que otros animales, como los perros, puesto que su capa de pelo es mucho menos densa en general, y casi nunca se presenta en dos capas para una mayor protección. Esto significa que los cambios de temperatura son mucho más bruscos en nuestros compañeros felinos, y que hay que tener un especial cuidado para proteger su salud.

Y es que no es extraño ver a un gato resfriado a causa de la exposición al frío. Por eso, si vives con un gato, deberás asegurarte de que la temperatura del interior de la vivienda es siempre la adecuada, y que no baja demasiado cuando el minino se queda solo. Esto es especialmente importante cuando se convive con razas que carecen de pelo, como el sphynx o el peterbald. Y también con otras razas que tienen un manto muy fino y corto, como el siamés.

Cómo saber si un gato tiene frío

Si tu gato se resfría, no cabe duda de que ha estado pasando frío durante algún tiempo. Pero hay algunas pautas que puedes observar para saber si tu gato tiene frío y evitar que llegue a ponerse malo. Por ejemplo, si tu gato busca continuamente el rincón más cálido de la casa, o pasa mucho tiempo tumbado junto al radiador, es posible que tenga frío. Los gatos soportan muy bien el calor y tienden a buscar espacios cálidos, pero si es algo demasiado frecuente, quizá la casa no esté a la temperatura adecuada para él.

También es posible que tu gato presente otros síntomas a causa del frío, como dolor en las articulaciones o falta de actividad. Incluso puede llegar a mostrarse más arisco por la incomodidad. Para darte cuenta de todo esto, es necesario que prestes atención a tu animal, porque la forma de comunicarse contigo es a través de sus actos.

Consejos para proteger a tu gato del frío

Proteger a tu gato del frío no es tan complicado. Lo primero que debes hacer es procurar que siempre tenga un lugar cálido y confortable donde descansar. Además, es aconsejable que mantengas la vivienda a una temperatura constante, sin altibajos, que pueden poner en riesgo la salud de tu mascota. Y no olvides ofrecerle una buena alimentación para que tenga todos los nutrientes adecuados para combatir el frío.

 

0 Comentarios

Deja un Comentario

Este sitio está protegido por reCAPTCHA y se aplican la política de privacidad y los términos de servicio de Google.