Gato de las Arenas

Existe en realidad muy poca documentación acerca del gato de las arenas. Se trata de un animal salvaje huidizo y escurridizo, que no suele dejarse ver cerca del ser humano. De ahí que sea tan complicado encontrar datos veraces sobre él, especialmente en lo que se refiere a imágenes o grabaciones.

De este animal se sabe que es uno de los mejor adaptados a las duras condiciones climáticas del desierto. De ahí que también se conozca como gato del desierto en algunos ámbitos. Es muy pequeño y mantiene un aspecto de cachorro durante toda su vida, lo que ha hecho que muchas personas se interesen por él como animal de compañía. A pesar de que en cautiverio no consigue sobrevivir por sus características salvajes y adaptadas al medio en el que vive.

Se desconoce el momento exacto de su aparición, pero, teniendo en cuenta sus características actuales para sobrevivir en su hábitat natural, es más que probable que lleve cientos de años desarrollando sus capacidades como gato del desierto. La mayor población de estos animales se encuentra en el norte de África, en la Península Arábiga y en toda la zona de Asia central y suroccidental. Concretamente, su mejor adaptación la ha conseguido en desiertos arenosos como los del Sáhara, Arabia, Pakistán, Irán, Turkmenistán y Afganistán. Y en algunas de ellas comparte territorio con el gato montés.

Uno de los motivos por los que resulta tan complicado poder observarlos y estudiarlos, es porque estos gatos de las arenas son fundamentalmente nocturnos. Las horas más calurosas del día se mantienen durmiendo entre las rocas, y por la noche salen a cazar para alimentarse. Su alimentación básica consiste en roedores pequeños, lagartos, arañas e insectos, pero también pueden ser presas de animales más grandes como lechuzas o chacales. Además, durante mucho tiempo han sido objetivo de la caza del ser humano para comerciar con sus pieles o para ser vendidos como mascotas, razón por la que actualmente es una raza protegida a punto de encontrarse en peligro de extinción.

Características del Gato de las Arenas

El gato de las arenas está considerado como el más pequeño de todos los felinos, y es que su tamaño suele mantenerse en los 50 centímetros de longitud, algo más añadiendo la cola, y los ejemplares adultos no sobrepasan los 3 kilos de peso en ningún caso. Sin embargo, sus pequeñas dimensiones no minimizan para nada su belleza.

De hecho, sus rasgos físicos son impresionantes y altamente llamativos, otra de las razones del interés de muchas personas en tenerlos como animal de compañía a pesar de que no tienen nada que ver con un gato doméstico.

Entre sus características más destacables, cabe mencionar una cabeza grande y ancha y unas orejas también anormalmente grandes que no se mantienen en proporción con el resto del cuerpo. La de las orejas de gran tamaño es una característica que suelen compartir los animales que habitan los desiertos, como el zorro fenec o la liebre de California, y responde a la necesidad de tener una audición más sensible por la zona, y además evitar la pérdida de calor corporal.

Su pelaje es más bien corto, pero no pegado al cuerpo, y muy suave al tacto y denso. El colorido más habitual es el arena, y suele presentar líneas o patrones más oscuros en la parte superior del cuerpo, además de en algunas zonas de las patas y en la punta de la cola. Sus patas, aunque no son muy largas, son robustas y fuertes, y su cola es bastante alargada en relación al resto del cuerpo, y tiende a afilarse hacia la punta. Destaca una característica en los gatos de arena muy poco habitual en el reino felino, y es que las plantas de sus patas están cubiertas en su totalidad por pelaje, debido a que necesitan protegerse de las arenas del desierto cuando queman.

Los ojos del gato del desierto son profundos, grandes y están bastante juntos. Suelen presentar una amplia variedad de tonalidades, aunque la más frecuente es la amarilla o ámbar. Una mirada penetrante que le permite ver en condiciones de baja luminosidad y que atrae a cualquiera que se cruce con ella.

Comportamiento del Gato de las Arenas

En el comportamiento del gato de las arenas destaca el sigilo y la precisión de movimientos. Es un gato que pasa más tiempo trabajando para cazar y sobrevivir que jugando, de ahí que no haya desarrollado las mismas habilidades sociales que otros gatos domésticos. Se trata básicamente de un depredador que pasa buena parte de la noche cazando para alimentarse, y buena parte del día oculto entre las sombras para sobrevivir a las altas temperaturas.

Es un animal muy sigiloso en sus movimientos y un cazador experimentado, pero no es sociable por naturaleza, y mucho menos en lo que al ser humano se refiere. Es casi imposible que un humano consiga acercarse a uno de estos animales, de ahí la escasez de fotografías y videos sobre esta especie. También destaca su alta inteligencia, lo que le otorga una habilidad única para no ser visto fácilmente, ni por los seres humanos ni por presas o cualquier otro animal.

Los cachorros juegan entre ellos en la camada para desarrollar sus habilidades de caza y para socializar entre congéneres, pero nunca llegan a convivir en manadas grandes cuando crecen. Sus hábitos diarios son siempre iguales, y no requieren de demasiada actividad física o de otras acciones para su vida. Además, es frecuente que estos animales padezcan enfermedades respiratorias, lo que también condiciona su modo de vida.

La esperanza de vida de estos animales es muy variable, puesto que depende en gran medida de las condiciones del entorno y de sus capacidades para sobrevivir en él. En cautiverio, podría llegar a vivir hasta 18 años, pero en su vida salvaje la esperanza de vida es mucho menor en general. Por otro lado, se trata de gatos que maduran rápidamente, y que a los 14 meses de edad ya son completamente adultos, de modo que están en disposición de reproducirse desde ese momento.

Curiosidades del Gato de las Arenas

  • El nombre científico de este gato es felis margarita, aunque todo el mundo lo conoce como gato de las arenas o gato del desierto.
  • Se han reportado casos de gatos de arena capturados para ser vendidos a particulares, que han muerto a los pocos días de encontrarse en una casa encerrados. Y es que estos animales no están hechos para el cautiverio, de ahí que nadie deba tratar de adquirir uno.
  • Su pelaje y el resto de características físicas le permiten soportar temperaturas extremas que van desde los 0º hasta los 55º. Todo un récord de supervivencia en un entorno tan hostil como es el desierto.
  • Además de maullar como cualquier gato, este animal emite un sonido similar al ladrido de los perros cuando quiere aparearse. Lo hace el macho con la intención de captar la atención de la hembra, que puede escucharlo a larga distancia.
  • El número habitual de gatitos de arena en cada camada suele ser de 3 o 4.
  • Es un animal bastante independiente, que no suele verse en grupos de varios individuos. Lo normal es que cada ejemplar viva solo a partir de los 4 meses, aunque pueden compartir el territorio con otros ejemplares sin que suponga un conflicto, ya que no son excesivamente territoriales.
  • Hasta el año 2017, jamás se habían conseguido grabaciones de camadas de gatos de las arenas. Después de mucho trabajo y esfuerzo, un grupo de científicos dio con una camada de tres ejemplares de entre seis y ocho semanas, en un video que se viralizó y dio la vuelta al mundo.
  • Resulta muy llamativo y divertido ver a un ejemplar adulto junto a un gatito de arena cachorro. Y es que estos animales mantienen la misma apariencia durante toda su vida y no aumentan su tamaño de manera exponencial, por lo que siempre parecen pequeños peluches, aunque no es así.
  • Al encontrarse en un entorno donde apenas hay agua, la hidratación del gato de las arenas proviene principalmente de los fluidos de sus presas, especialmente de la sangre. De ahí que sea también temido por las personas a pesar de su adorable aspecto. Esta característica le permite alejarse de las zonas sin agua y pasar incluso varios días sin beber una gota.

En la actualidad no existe ninguna vía legal para conseguir un ejemplar de gato de las arenas como animal de compañía. Estos animales no están preparados para vivir en cautividad, y es muy raro que sobrevivan más de algunos meses fuera de su hábitat natural. Por eso, si cualquier persona o empresa te ofrece un ejemplar de esta raza, solo existe la posibilidad de que sea un fraude o de que el animal sea salvaje, ambos casos de delitos en los que el animal será el primer perjudicado. No obstante, puedes encontrar otras razas de gran belleza que sí son excelentes mascotas, así que prueba a encontrar la raza de gato más adecuada para ti o acude a una protectora donde puedas rescatar algún gatito abandonado.

Gato de Arena